ENTREVISTA

Entrevista: La llegada de la energía solar a Sudamérica

Jon Segovia, Socio Director de la empresa que estará a cargo del primer proyecto solar fotovoltaico sometido al Sistema de Evaluación Ambiental en Chile y toda Sudamérica, denominado Cala Solar 1., se refiere en una entrevista publicada en Foro Energías, a las altas expectativas que la firma española tiene para esta nueva central y el desarrollo de la energía solar en Chile.
¿Cuál sería la principal función que tendría esta planta en Chile?
Es una planta 100% comercial y de dimensiones significativas con 10 Mw de capacidad instalada que aportarán energía al Sistema Interconectado del Norte Grande (SING).
¿A cuánto asciende la inversión que requerirá esta planta?
La nueva planta requerirá una inversión cercana a los US$40 millones.
¿Cuándo estiman que se inicien y finalicen las obras de la nueva central?
Cuando todas las exigencias (de carácter administrativo) que quedan pendientes se aprueben daremos inicio a la construcción, y estimamos que a finales de este año esté terminada o a más tardar a principios de 2011.
¿A qué nivel se encuentra Chile en lo que se refiere a condiciones políticas y técnicas para desarrollar la industria de la energía solar?
Yo lo veo bastante bien. Primero, porque el recurso solar en Chile es envidiable con un 50% más de radiación que el sur de España, considerada una zona con buena radiación.
La disponibilidad de Chile en ese sentido es casi única, porque es poseedor de uno de los tres sectores con mayor radiación solar del mundo, junto con el desierto de Mojave, en Estados Unidos, y el Sahara.
Además, la situación política y social es muy estable, lo que convierte a Chile en un país con mucho potencial, augurando un gran crecimiento en este tipo de energías.
 A esto debemos agregar la ley de energías renovables que comienza a regir este año y que incentiva el uso de estas fuentes, demostrando que hay una apuesta país y eso es muy interesante.
¿Cuándo podríamos hablar de un desarrollo más masivo de estas tecnologías en Chile?
El desarrollo habrá que ir viéndolo en el camino, ya que en el último tiempo han bajado los costos de la tecnología solar. Además, hay un gran crecimiento a nivel mundial; Obama ya ha dicho que generará  cinco millones de trabajos verdes, en tanto, la Unión Europea también está apostando por estas tecnologías, lo que provocará una mayor disminución en su valor, aunque hoy ya están a precios equivalentes a los equipos eólicos.
Si a esto sumamos el recurso solar de Chile podríamos esperar un crecimiento fuerte en el corto plazo.
¿Cómo ve el tema de Latinoamérica frente al desarrollo de estas tecnologías?
Bueno, Chile es un caso diferente al resto de sus vecinos con una situación que no es muy comparable, partiendo por el recurso solar, ya que los niveles de radiación no son tan altos como en el caso chileno.
Eso no significa que no vayan a desarrollar las tecnologías, pero sí con menor eficiencia, entonces Chile debe asumir su posición de liderazgo regional como lo ha hecho Alemania o España en Europa.
Chile debe ser la cabeza de la plataforma de llegada de la energía solar a Sudamérica y es probable que lo sea.
De acuerdo al crecimiento que debería experimentar Chile en materia solar, ¿qué país da el mejor ejemplo a seguir en esta materia?
Creo que no es replicable, cada país tiene una estrategia distinta y Chile no está siguiendo fielmente ninguna de ellas, porque en el caso de las actuales potencias en energía solar, esta  es subsidiada. En Estados Unidos existe un subsidio fiscal, mientras que en España y Alemania tienen una tarifa regulada subsidiada.
Chile no tomará ninguna de estas opciones en su totalidad, puesto que no hay un subsidio directo, pero sí tienen una ley de energías renovables que exige una generación obligatoria del 5% inicial con este tipo de fuentes.
Chile tiene la oportunidad  de dar ejemplo en ciertos aspectos como España y Alemania que siendo países que no sólo han apostado por generar energía verde, sino que también por un sector al que le están sacando un provecho notable. Esto resalta aún más en el caso de Alemania que sin tener niveles de radiación excepcionales es un país puntero en esta materia y está exportando mucha tecnología y materiales para su desarrollo.
¿Algo que también podría Suceder en Chile?
Correcto. Lo que pasa es que ahí se juega en una liga internacional, y en Chile se debe hacer una apuesta fuerte o se le hará difícil competir en la fabricación de módulos donde debe enfrentar mercados como el Chino, el Alemán o el Español donde son líderes y en el caso de los asiáticos con mano de obra muy barata.
Chile primero debe generar energía verde y después ver si a nivel regional se está experimentando un crecimiento como para exportar tecnología a sus vecinos, creo que ese es el camino que deberán seguir.
Se ha hablado mucho del proyecto Desertec en el desierto del Sahara que podría aportar gran parte de la energía en Europa ¿Ves posible una iniciativa de semejante envergadura en nuestro país?
Desertec es un proyecto faraónico con una inversión brutal y por tanto habrá que ver cómo evoluciona ese proyecto, sobre todo por el tema de la red de transmisión.
Por ejemplo, en Chile en teoría se podría hacer un proyecto de 12 kilómetros cuadrados que alimente de energía a todo el país, pero en un campo real se debería trabajar en una red de transmisión indicada para emprender un proyecto de tal envergadura y creo que ese es un tema lejano aún para Chile.